El odio que das

Reseña: El odio que das, Angie Thomas.

-Ficha técnica-

Autor: Angie Thomas Título: El odio que das Editorial: Océano

Fecha: Febrero de 2017 Páginas: 448 Español: Sí

-Sinopsis-

Starr es una chica de dieciséis años que vive entre dos mundos: el barrio pobre de gente de gente negra donde nació, y su escuela situada en un elegante distrito residencial blanco. El difícil equilibrio entre ambos se hace añicos cuando ella se convierte en testigo de la muerte a tiros de su mejor amigo, Khalil, a manos de la policía. A partir de ese momento, todo lo que Starr diga acerca de la aterradora noche que cambió su vida podrá ser usado de excusa por unos y como un arma por otros. Y lo peor de todo es que ambos bandos esperan a que de un paso en falso para poner fin a su vida.

-Reseña-

¿Cuál es el punto de tener una voz si vas a permanecer callada en esos momentos donde no deberías?

Es prácticamente imposible que no hayamos escuchado del movimiento Black Lives Matter y el reciente asesinato de George Floyd a manos de un policía blanco en Estados Unidos. Han habido cientos de protestas a nivel mundial exigiendo justicia por él y decenas de hombres negros que han sido asesinados por blancos. El racismo no es un tema nuevo, tristemente, es un odio que cientos de personas tienen desde hace cientos de años y que, posiblemente, nunca se erradique. Pero se espera que haya justicia por aquellas personas que ya no están y que no hicieron otra cosa que nacer con cierto color de piel.

El odio que das habla sobre eso, Starr ve a su mejor amigo siendo asesinado por un policía a pesar de que él no había hecho otra cosa que preguntar por qué lo habían detenido y cooperar con el oficial.

Ahora ella tiene el poder de decir qué fue lo que en verdad pasó, revelar la verdad sobre quién fue Khalil y exponer las mentiras de la policía que dice que él solo era un traficante de drogas, tan agresivo que el oficial temió por su vida.

El odio que das tiene un mensaje muy poderoso, contiene temas delicados como lo es el racismo o la brutalidad policial, creo firmemente que todo el mundo debería leerlo. Este libro te educa, te hace entender muchas cosas y en definitiva puede cambiar tu pensamiento.

Para crear este libro, Angie Thomas se inspiró en dos cosas:

1. El movimiento Black Lives Matter. Este movimiento nació en 2013 a raíz del asesinato de Trayvon Martin, un joven de 17 años que fue asesinado por un hombre blanco llamado George Zimmerman de 28 años.

Zimmerman, quien era vigilante del vecindario, llamó a la policía diciendo que había un hombre sospechoso caminando por las calles. A pesar de que la operadora de emergencias le dijo que se quedara en su camioneta, Zimmerman salió y tuvo una pelea con Martin terminando con Zimmerman disparándole y con Martin muriendo cerca de la casa de la prometida de su padre.

No se hizo ningún arresto. Desde ese día surgió este movimiento que busca erradicar la supremacía blanca e intervenir en casos de violencia injustificada hacia la comunidad negra por el estado o sus vigilantes.

¿Qué es la supremacía blanca? Es una ideología basada en argumentos pseudocientíficos que ponen a la raza blanca como una raza superior a las otras etnias, y por lo tanto, deberían dominar a otras razas.

Recientemente hemos escuchado del movimiento por el asesinato de Ahmaud Arbery, Breonna Taylor y George Floyd ocurridos en febrero, marzo y mayo, respectivamente. Hemos visto las protestas en todo Estados Unidos que terminaron hasta con el presidente Donald Trump refugiado en un búnker y con la Casa Blanca completamente apagada.

Como hay gente que, al parecer, no puede dejar de hablar sobre sí misma por más de 5 minutos, también surgió el hashtag All Lives Matter (Todas las Vidas Importan). Dejemos algo en claro, sí, todas las vidas importan, pero para los blancos racistas la vida de personas negras, latinas, nativos americanos o asiáticas importan menos. ¿Todas las vidas importan? Sí, deberían importar, pero ellos no están siendo víctimas de brutalidad policial, ellos pueden darse el lujo de protestar frente a la policía con armas pero otros no pueden protestar por el asesinato de un miembro de su comunidad.

Cada quien protesta como quiere, no se puede negar la enorme influencia que tienen los motines para conseguir derechos. Se vio cuando las mujeres consiguieron el voto, se ve ahora que después de todas las protestas se haya detenido a todos los oficiales relacionados con la muerte de George Floyd.

Puedes destruir madera o ladrillo, pero no puedes destruir un movimiento.

2. Tupac. Thug es una palabra utilizada para referirse a una persona violenta, Thug Life sería la manera violenta y/o criminal que una persona vive. En los 90s esta frase fue popularizada gracias al rapero Tupac quien le dio un nuevo significado:

The Hate U Give Little Infants Fucks Everybody. El odio que das a los más pequeños nos jode a todos. Angie Thomas nos explica lo que Tupac quiso decir con esto: si dejas que un niño nazca y crezca en un ambiente racista, violento y con menos oportunidades que otros solo dejas que el ciclo continúe.

Es una tontería que el gobierno les llame de esta forma, como el presidente Trump en uno de sus recientes tweets, cuando ellos son los principales responsables del ambiente en el que crecen tantos niños. Ellos no lo entienden porque tienen privilegios por ser blancos. Ellos nunca han sido víctimas de esclavitud, no tienen la misma posibilidad de ser disparados por un oficial de policía, sus arrestos suelen ser más pacíficos, los mejores puestos en empresas los tienen hombres blancos y con su mejor salario pueden mandar a sus hijos a mejores escuelas. Todo esto solo causa más rencor, resentimiento y una bomba de tiempo, en especial cuando su gente es asesinada y no hay justicia.

Ese es el odio que nos dan, cariño, un sistema diseñado en nuestra contra.

Este es un libro muy fuerte que nos invita a alzar la voz cuando vemos algo que está mal, por mínimo que sea, porque el cambio no llega solo y nosotros debemos exigirlo.

Hay algo que me gustó bastante y es el uso de micro agresiones, que son expresiones y/o comportamientos breves y comúnes que denotan una comunicación hostil, denigrante o negativa sobre minorías.

En el libro hay dos momentos, que recuerde, sobre esto. El primero sucede cuando en un partido de básquetbol, Starr pierde la pelota y una de las jugadoras le dice que lo trate como si fuera una cubeta de pollo frito; el segundo es cuando la misma jugadora le dice a Maya, amiga de Starr que es asiática-americana, que si su familia comió gato en Acción de Gracias. Cuando ellas le dicen que sus comentarios son racistas, ella dice que no.

Pero sí lo son. Y al igual que estas expresiones hay muchas más, como mirar de forma sospechosa a otra persona por su color de piel, o querer que un blanco se case con un blanco, todas estas actitudes deberíamos cambiarlas.

Ese es el problema. Dejamos que las personas digan cosas, y lo dicen tanto que se convierte en algo que está bien para ellos y para nosotros es normal.

Este libro se siente muy real. Porque lo es. Khalil es un personaje ficticio al igual que todos los demás, pero como él hay cientos de casos iguales. Hombres negros desarmados asesinados por hombres blancos que frecuentemente son policías.

La institución que se supone que debería protegerte es, en realidad, de la que más se desconfía, como dijo el padre de Starr, la policía primero dispara y después pregunta. Nos mostró la brutalidad policial, el enojo justificado de una comunidad que terminó en un motín, la deshumanización de una persona para justificar su asesinato y el cómo un caso tan simple por tener un testigo que presenció dicho asesinato pueden hacerlo sumamente complicado.

Todo eso es real. Lo vimos en George Floyd, en Eric Garner, en Trayvon Martin, en decenas más en todo el mundo. Estamos en 2020, 52 años después del asesinato de Martin Luther King Jr., 55 años después de la muerte de Malcolm X, 190 años después de que se condonara la esclavitud en Estados Unidos, ya no es momento de quedarse callado.

La gente como nosotros en estas situaciones se convierten en hashtags, pero rara vez obtienen justicia. Creo que todos esperamos por esa vez, esa vez donde termine bien.

Sobra decir que este libro me gustó mucho, todos los personajes están bien construidos y todos tienen una razón de ser. Mi favorita, obviamente, es Starr, que pasó de ser una adolescente tímida de mostrar quien realmente era en su escuela y tener miedo de su voz a hablar en medio de una protesta.

El odio que das tiene una adaptación cinematográfica que se estrenó en 2018, es una adaptación apegada al libro, contiene todo lo necesario. Es protagonizada por Amandla Stenberg, Anthony Mackie, Algee Smith, KJ Apa, entre otros. Les dejo el tráiler aquí.

-Calificación-

4.5/5

-Lugares para conseguir el libro-

Amazon y Gandhi.

*Me voy no sin antes recordarles que esta reseña es mía, si a ustedes no les gustó el libro, qué bueno, supongo que vieron algo que yo no.